Autores
David Fonseca, david.fonseca@salle.url.edu; GRETEL La Salle, Universitat Ramon Llull, Barcelona, España
Silvia Necchi, silvia.necchi@salle.url.edu; GRETEL La Salle, Universitat Ramon Llull, Barcelona, España
Marian Alaez, arian.alaez@deusto.es; Facultad de Derecho, Universidad de Deusto, Bilbao, España
Susana Romero, sromeroyesa@deusto.es; Facultad de Ingeniería, Universidad de Deusto, Bilbao, España
Efraim Centeno, efraim.centeno@itt.comillas.edu; Instituto de Investigación Tecnológica, Universidad Pontificia de Comillas, Madrid, España
Resumen
Motivar al alumno de primer curso de grado, no solo mejora su grado de satisfacción y su rendimiento, sino que puede prevenir el riesgo de abandono temprano de los estudios.
En este sentido, para potenciar la motivación se antoja como estrategia importante trabajar las competencias específicas desde un abordaje transversal, menos específico y que permita al alumno vislumbrar las potencialidades de sus estudios y de sus relaciones entre iguales.
El presente artículo muestra el resultado de dos actividades transversales realizadas en el primer curso del grado de Estudios en Arquitectura, donde el trabajo en equipo es esencial para su entrega.
Los resultados han permitido identificar tanto fortalezas como debilidades de cada práctica gracias a su enfoque mixto (cuantitativo / cualitativo), lo que permitirá un rediseño de las actividades para el siguiente curso.